¿Debe ser el PP moderado? Sí, pero no centrista

Este fin de semana, Pedro J. Ramírez en El Mundo y Juan Carlos Girauta en Libertad Digital han ilustrado espléndidamente las dos posturas entre las que oscila el debate público sobre la actitud que debería adoptar el Partido Popular ante las próximas elecciones generales. […]

En definitiva, uno aboga por lanzarse a la caza de los que denomina “moderados indecisos” y de los nuevos votantes, y el otro apuesta por cultivar a los propios, ignorar a los demás y confiar que los votos que el PSOE pierda por la izquierda y por la abstención le den la mayoría al PP. Suelo coincidir con Girauta, en especial en todo lo que se refiere a Cataluña, pero en este caso me da la sensación de que no aspira a que el PP gane las elecciones, sino a que las pierda el PSOE. No intenta ampliar base electoral, sino que confía en que el PSOE vea la suya reducida. […]
Parece que Girauta renuncia o se niega a aceptar que exista una bolsa de votos que puede votar al PSOE o al PP en función de muy diferentes factores, y menciona tan sólo la imposibilidad metafísica de que un socialista pueda votar al PP. De acuerdo, pero ¿y los no socialistas que tampoco digieren bien al PP? ¿No vale la pena aproximarse a ellos, o es que no existen?[...] El artículo completo en Los árboles y el bosque
Creo que el PP debe explicar bien sus ideas, con lo que convencerá a muchos indecisos. Me parece increible que el único que conteste a los periodistas de programas de humor sea el Emperador Gallardón. Echo de menos un partido liberal, pero también echo de menos un partido en el que los que tienen que dar la cara no sean tan estirados. Hay gente que sabe hablar y que también tiene un fondo. Es decir, gente de ideas pero que sepa explicarlas. No como Juan Costa, que tendrá buena imagen, pero explicando ideas...
Costa promete una ley contra el cambio climático si el PP gana las elecciones
Le recomiendo que vea El gran timo del calentamiento global

PD: Alejandro Magno -si no me acuerdo mal- ya quiso domeñar el Ponto a puro látigo, y Macbeth con sus brujas creo que también hizo una intentona de imponer su voluntad a los elementos. Pero ha sido en la era de la cienciaficción cuando han proliferado los relatos de maléficos científicos descubridores de artilugios para controlar los fenómenos atmosféricos y adueñarse así del poder absoluto en el mundo: controlar las cosechas, chantajear a naciones enteras, destruirlas por el hambre subsiguiente a las sequías, o por un nuevo diluvio universal, ... A veces, esos malos vienen en naves espaciales, procedentes de otro mundo y de otro tiempo.
Así que es natural que Costa se anticipe -ya que el cambio climático, justamente, amenaza con desbordar la costa con la crecida del mar-.
Ley del cambio cimático.
Artículo primero.- a partir de la entrada en vigor de esta ley, el clima dejará de cambiar.
Artículo segundo.- si al clima se le ocurre incumplir el artículo primeto, caerá sobre él el peso de esta ley evanescente y estúpida [...]

- Un senador presenta una demanda contra Dios por causar desastres naturales que provocan "sufrimientos humanos"