Un separatista propuesto por CIU en el poder judicial

CiU y ERC, rivales en la carrera política por el liderazgo independentista, han encontrado un lugar común: el Círculo de Estudios Soberanistas. El nuevo “think tank” pretende aglutinar a intelectuales y profesionales defensores del «Estado catalán». Pero ese antiespañolismo no debería tener acceso a las instituciones del Estado, ni al Consejo del Poder Judicial ni al Tribunal Constitucional, ya que antepone sus particularismos a los intereses generales y al cumplimiento leal de sus funciones.
Los que cobran de un órgano del Estado deberían respetar la Constitución que juran o prometen cumplir y hacer cumplir y deberían ser leales a la Nación que se rige por esa Constitución y a las funciones del órgano en el que se integra. Por eso los planteamientos de López Tena son incompatibles con su condición de vocal del Consejo General del Poder Judicial. Además es autor del libro «Cataluña bajo España. La opresión nacional en democracia»,
El notario nacido en Sagunto (Valencia) afirma en sus escritos que «[los catalanes] no somos los únicos del mundo sometidos a un proceso de discriminación, exclusión, subordinación y, a fin de cuentas, asimilación y/o genocidio». Compara la opresión del “Estado español” con la violencia de género, la homofobia, el racismo y otros males históricos: «Debemos analizar qué han pensado y qué han hecho para salir adelante los pueblos colonizados, las minorías nacionales, las razas sometidas, el género subordinado, las orientaciones sexuales perseguidas, los damnificados de la tierra», asevera López Tena.
El portavoz de la Asociación Profesional de la Magistratura (APM), mayoritaria entre los jueces, Antonio García, aseguró que «ese tipo de declaraciones» son «absolutamente delirantes, propias de una persona aquejada de algún tipo de dolencia o de enfermedad mental. Lo digo con todo el respeto», subrayó. Sin embargo, el portavoz de Jueces para la Democracia (JpD), Jaime Tapia, se limitó a calificar de «bastante deplorables» las razones que López Tena para pedir la independencia de Cataluña y a ¿aclararnos? que «No ha habido ningún genocidio, en ningún caso, en la historia, respecto al pueblo catalán».
En la legislatura en la que, según Zapatero, debían calmarse los ánimos nacionalistas que exacerbó el PP, resulta que el nacionalismo ha alcanzado sus mayores cotas de intransigencia. Ahora que Zapatero y su partido quieren demostrar que vuelven a creer en España, el Gobierno y el PSOE deberían actuar contra los que la atacan.
P.D: Otra muestra de la existencia en España de partidos nacionalistas moderados...