El gobierno del bipartito gallego ha impulsado una reforma de la ley de la función pública de Galicia (de 26 de mayo de 1988). Esta reforma ha sido aprobada por el Parlamento de Galicia en una sesión extraordinaria (había prisa, mucha prisa) celebrada el 17 de julio de 2007 (fecha de vacaciones parlamentarias). El texto de la reforma lo ha publicado el Parlamento de Galicia un día antes de la celebración del día de la "patria gallega" (Boletín Oficial del Parlamento de Galicia, nº 396, de 24 de julio de 2007). Y es que algunos se empeñan en dar credibilidad a la frase de que "el patriotismo es el último refugio de los canallas". Aunque algunos, más finamente, los llaman "caraduras estructurales". ¿Qué significa la reforma? Muy sencillo: que si un conserje es nombrado director general, después de haber dejado el cargo ya no vuelve a cobrar el sueldo normal de un conserje, porque a partir de dejar el alto cargo siempre va a cobrar el mismo complemento de destino (una pasta más importante que el sueldo teórico) que tenía cuando era alto cargo.
La situación es escandalosa, y la única que ha tenido el valor de protestar es Encarna Otero en un artículo titulado "Privilexios ou igualdade: disposición adicional 17". Encarna finalizaba este artículo diciendo: "como en política ademais de pensar tamén cumpre actuar quero facer un chamamento a desobediencia política no acatamento desta norma e a insubmisión económica como criterio ético para deste xeito contribuír a que Galiza e o seu Goberno sexan mostra de ética rexenerativa".
Permítanme que me quite el sombrero y celebre las palabras de Doña Encarna. Muy bien. Y digo muy bien porque Encarna Otero, que es funcionaria, queda muy beneficiada por esta reforma y, sin embargo, ha dado más consideración al bien público que a su propio interés personal. Pero Encarna, que ha demostrado ser honesta, puso en peligro la bicoca de sus compañeros políticos del bipartito y de sus enemigos del Pp. La reacción no se hizo esperar por parte de los que ya se frotaban las manos con la reforma:
El psOe se desata:
- El conselleiro Ricardo Varela (que es funcionario del ayuntamiento de Lugo y, por tanto, beneficiario de la reforma) advirte a Encarna Otero de que é "delito" a "desobediencia" a unha lei como a de Función Pública.
- El conselleiro Méndez Romeu, con más jeta todavía, insta a Encarna Otero a que presente a súa dimisión ou renuncie formalmente a "beneficios persoais".
En cuanto a los altos cargos del BNG... no se atreven a criticar a Encarna, como los del PSOE, pero se callan como putas. De hecho, votaron a favor de esta ley en el Parlamento.
Y los del PP, en lugar de denunciar el expolio, se callan... bueno, no sólo se callan. También votaron a favor de esta ley que fue aprobada por unanimidad. Digamos, que se han dejado comprar. Y es que el plus salarial favorece a altos cargos de la Xunta desde 1981. La mezquindad y la avaricia personales son, una vez más, causa de otra ocasión perdida para hacer oposición. Y Don Mariano, de vacaciones en Galicia donde parece no haberse enterado de la forma de hacer "oposición" que tiene su compañero Núñez Feijoo... Vía Radikales libres
La situación es escandalosa, y la única que ha tenido el valor de protestar es Encarna Otero en un artículo titulado "Privilexios ou igualdade: disposición adicional 17". Encarna finalizaba este artículo diciendo: "como en política ademais de pensar tamén cumpre actuar quero facer un chamamento a desobediencia política no acatamento desta norma e a insubmisión económica como criterio ético para deste xeito contribuír a que Galiza e o seu Goberno sexan mostra de ética rexenerativa".
Permítanme que me quite el sombrero y celebre las palabras de Doña Encarna. Muy bien. Y digo muy bien porque Encarna Otero, que es funcionaria, queda muy beneficiada por esta reforma y, sin embargo, ha dado más consideración al bien público que a su propio interés personal. Pero Encarna, que ha demostrado ser honesta, puso en peligro la bicoca de sus compañeros políticos del bipartito y de sus enemigos del Pp. La reacción no se hizo esperar por parte de los que ya se frotaban las manos con la reforma:
El psOe se desata:
- El conselleiro Ricardo Varela (que es funcionario del ayuntamiento de Lugo y, por tanto, beneficiario de la reforma) advirte a Encarna Otero de que é "delito" a "desobediencia" a unha lei como a de Función Pública.
- El conselleiro Méndez Romeu, con más jeta todavía, insta a Encarna Otero a que presente a súa dimisión ou renuncie formalmente a "beneficios persoais".
En cuanto a los altos cargos del BNG... no se atreven a criticar a Encarna, como los del PSOE, pero se callan como putas. De hecho, votaron a favor de esta ley en el Parlamento.
Y los del PP, en lugar de denunciar el expolio, se callan... bueno, no sólo se callan. También votaron a favor de esta ley que fue aprobada por unanimidad. Digamos, que se han dejado comprar. Y es que el plus salarial favorece a altos cargos de la Xunta desde 1981. La mezquindad y la avaricia personales son, una vez más, causa de otra ocasión perdida para hacer oposición. Y Don Mariano, de vacaciones en Galicia donde parece no haberse enterado de la forma de hacer "oposición" que tiene su compañero Núñez Feijoo... Vía Radikales libres
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